jueves, 17 de diciembre de 2009

El bien como teleología del Derecho y las utopías

Dentro del campo filosófico corresponde a la filosofía del derecho "saber qué es el derecho, mas no respecto de la vida jurídica, sino respecto de toda la vida, para comprender por qué aquél existe en ésta"1, además de ser dicha disciplina necesaria para combatir las "lagunas [...] discrepancias o antinomias existentes en los textos legales"2. El Derecho, por su parte, es definido en palabras de García Máynez como "un orden concreto"3 o por Ferrater Mora como "el conjunto de lo legítimo"4; éste término es análogo a o)rqo&j, rigth o Recht cuyo contenido es "lo que está conforme a algo o, mejor dicho, lo que está de acuerdo con una regla, lo que la acata o cumple sin desviaciones, rodeos o vacilaciones"5, de este modo se puede afirmar que "todo derecho existe para regular el comportamiento del hombre"6 lo cual no contradice la concepción aristotélica7 de que la política "pone su mayor cuidado en hacer a los ciudadanos de tal condición que sean buenos y obradores de buenas acciones"8. Esto se procura mediante "el expediente más idóneo que encontraron los griegos para la realización de tan alto destino [...] una constitución política"9. En ella se encuentran las normas con las que se pretende dar cierto orden a una nación10 con el fin de alcanzar determinados objetivos11. Como lo que se trata de ordenar es la conducta de los hombres "la colaboración de los sometidos resulta indispensable"12 por lo que el derecho como orden se daría cuando los individuos que se pretende ordenar se ajustan al sistema normativo13.


Ya que las normas persiguen el cumplimiento de determinados objetivos se puede decir que se tiende a un fin, desvelándose así la teleología14 del derecho. Así como la finalidad de todas las acciones y elecciones es un bien15, en los procesos teleológicos se "presupone que el sujeto que tiende a la realización de una finalidad atribuye a ésta un valor positivo"16, de manera que los individuos sólo cumplirían las normas a las que están sujetos si las transformasen en sus bienes17.Para ello es necesario "plantearse el problema de la bondad o justicia intrínsecas de las mismas"18 y convencerse de que dichas normas son buenas (o las mejores de entre sus elecciones). Un ejemplo al respecto se encuentra en el Malestar de la cultura al exponerse que el primer Derecho surge cuando un grupo de individuos sacrifican algunos de sus instintos para unirse en una mayoría que resulte más poderosa que cada uno de los individuos por separado19. Aquí se ve cómo los hombres tuvieron que elegir un bien común sacrificando bienes particulares para crear ese derecho.


No creo errar al afirmar que el Derecho aspira a encontrar un bien que sea tal para todos, pero dicho ideal parece sólo alcanzarse en las utopías, pese a que han nacido y se mantienen como género literario20. Empero, las utopías son captadas por el lector como "hipótesis plausibles"21 que lo persuaden mediante la retórica de la ficción22 de una idea de felicidad.


Retomando el tema del bien como finalidad del Derecho es lícito añadir que dicho bien se procura plasmar en una constitución política, medio igualmente utilizado por las utopías para recoger sus normas ideales. Como requisito previo para crear una constitución ideal Aristóteles propone definir "cuál es la vida más digna de escogerse"23, en otras palabras la mejor (superlativo de bien). El problema del Derecho y del establecimiento de una utopía es, por tanto, el del bien, con lo que se torna ardua labor encontrar un bien al que todos se sometan por convicción propia. Afirma Freud que la religión es la única que "sabe responder a la pregunta por el fin de la vida humana"24 y esto es evidente puesto que Dios pasa a tomar el lugar del bien, convirtiéndose las órdenes monásticas en fácil paradigma de comunidades utópicas. Pero no sólo hay una religión y, por lo mismo, tampoco una sólo concepción de Dios, con lo que la problemática permanece.


Ahora bien, si cada cual tiene su idea de lo que es(tá) bien y conforme a ella guía sus actos, será necesario un consenso o convencimiento mutuo sobre lo que es(tá) bien para poder, en base a ello, hacer un Derecho justo y establecer por fin una utopía.


¿Es esto posible? En vistas de que "las utopías (en plural) no expresan fácilmente una significación central de la utopía (en singular)"25 y aunado a que "se dirigen más hacia el futuro"26 que a una instauración presente, la respuesta es negativa. Mas por mirar al futuro y por ser agente que "destruye un orden dado"27 su ausencia supondría "un estancamiento total"28, motivo por lo cual cobra vigor la "Ventana sobre la utopía" del escritor Eduardo Galeano:


[La utopía] está en el horizonte –dice Fernando Birri-. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine, nunca la alcanzaré. ¿Para qué sirve la utopía? Para eso sirve: para caminar.29


Para caminar y no quedarse estancado. Algo similar dice Pedro Gómez Danés* respecto a la perfección: el ser humano no es perfecto, sino perfectible, y mientras tienda a la perfección de lo que es en cuanto humano (en su unidad racional, volitiva y sensible) estará obrando bien30.


Como se ha dicho, las utopías son para seguir caminando, al punto que Cioran diagnostica esclerosis y ruina a una "sociedad incapaz de dar a luz una utopía y de abocarse a ella"31. Hay, pues, necesidad de utopías que mantengan al Derecho en búsqueda (que implica movimiento) de solventar las lagunas normativas generadas por los cambios sociales en el tiempo y espacio. Asimismo es importante señalar, junto con Sloterdijk, que la utopía social de antaño tiende a conformar las utopías individuales de la actualidad, en las que, mediante la autohipnosis, el individuo se convence de que su idea de bien es la finalidad a la que debe tender32. Independientemente del camino, social o individual, la labor del estudioso (filósofo) consiste en hacer surgir las utopías de las tensiones sociales33 originadas por la heterogenia constante en la que está inmersa la sociedad y así mantenerla en un crecimiento hacia el bien.



NOTAS


1 Petro Piovani, Linee di una filosofia del diritto (Padua: Cedam, 1958), 13, cit. en Eduardo García Máynez, Filosofía del derecho (México: Porrúa, 1994), 16.
2 Eduardo García Máynez, Filosofía del derecho (México: Porrúa, 1994), 10.
3 Ibídem, 9.
4 José Ferrater Mora, Diccionario de filosofía, tomo I (Barcelona: Ariel, 2004), 817.
5 Ibídem.
6 E. G. M., Ob. cit., 18.
7 Recordar que para el griego “la triada moral, política y derecho se encontraban indisolublemente unidas” (Aguilera 2007, 13)
8 Aristóteles, Ética Nicomaquea (México: UNAM, 1994), 141.
9 Antonio Gómez Robledo, Introducción a Política de Aristóteles (México: UNAM, 2000), XXI.
10 Orden entendido como “el sometimiento de un conjunto de objetos a una regla o sistema de reglas cuya aplicación hace surgir, entre dichos objetos, las relaciones que permiten realizar las finalidades del ordinante” (Máynez 1994, 23)
11 E. G. M., Ob. cit., 30.
12 Ibídem, 27.
13 Ibídem, 21.
14 Del griego te&loj, fin(alidad), y logo&j, que en este contexto se puede traducir como "tratado" o "saber".
15 A., Ética Nicomaquea, 107.
16 E. G. M., Ob. cit., 30.
17 Ibídem, 43.
18 Ibídem, 22.
19 Sigmund Freud, El malestar en la cultura (Madrid: Alianza Editorial, 2004), 40-1.
20 Paul Ricœur, Ideología y utopía (Barcelona: Gedisa, 1997), 289.
21 Ibídem, 290.
22 Ibídem.
23 A., Política (México: UNAM, 2000), 200.
24 S. F., Obras completas, tomo XXI, El malestar en la cultura (Buenos Aires: Amorrortu, 1976), 76.
25 P. R., Ob. cit., 290.
26 Ibídem, 292.
27 Ibídem.
28 E. M. Cioran, Historia y utopía (México: Tusquets, 2003), 118.
29 Eduardo Galeano, Las palabras ardientes (México: Siglo veintiuno, 1993)
* Profesor de Metafísica, Ética y Ontología e la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
30 Pedro Gómez Danés, notas del curso de Ética, Octubre, 2009.
31 E. M. C., Ob. cit., 118.
32 Peter Sloterdijk, La utopía ha perdido su inocencia, entrevista con Fabrice Zimmer, publicada en Magazine Littéraire, mayo, 2000, traducción del francés de Ramón Alcoberro http://etpclot.jesuitescat.edu/~37272647/sloterdijk.htm (acceso 9 de diciembre, 2009)
33 Ibídem.

BIBLIOGRAFÍA


  • Aguilera Portales, Rafael. «Utilidad y sentido metodológico, hermenéutico, ontológico, axiológico y didáctico de la Filosofía del derecho.» Conocimiento y cultura jurídica, 2007: 11-41.
  • Aristóteles. Ética Nicomaquea. México: UNAM, 1994.
  • —. Política. México: UNAM, 2000.
  • Cioran, E. M. Historia y utopía. México: Tusquets, 2003.
  • Ferrater Mora, José. Diccionario de filosofía. Vol. I. Barcelona: Ariel, 2004.
  • Freud, Sigmund. El malestar en la cultura. Madrid: Alianza, 2004.
  • —. Obras completas: El malestar en la cultura. Vol. XXI. Buenos Aires: Amorrortu, 1976.
  • Galeano, Eduardo. Las palabras ardientes. México: Siglo veintiuno, 1993.
  • García Máynez, Eduardo. Filosofía del derecho. México: Porrúa, 1994.
  • Gómez Danés, Pedro. «Notas del curso de Ética.» San Nicolás de los Garza, Octubre de 2009.
  • Ricœur, Paul. Ideología y utopía. Barcelona: Gedisa, 1997.
  • Sloterdijk, Peter. «La utopía ha perdido su inocencia.» filosofia y pensament. http://www.alcoberro.info/v1/sloterdijk.htm#slo1 (último acceso: 10 de Diciembre de 2009).


lunes, 28 de septiembre de 2009

(re)Valoración de la obra e inmortalidad

Un recurso frecuentemente utilizado por los medios y mercados para resucitar a autores difuntos en el olvido son eventos tales como la última gira, el concierto de despedida, las conmemoraciones y homenajes. Así ocurrió con The Beatles este 9 de septiembre pasado (09/09/09) y recientemente con Michael Jackson fallecido ha poco. Con ello vemos un fenómeno que sucedió también a Elvis, van Gogh, Galileo, la reina del tex-mex Selena, Benedetti, entre otros, y que incluso es parodiado en la serie de televisión Pinky and the Brain (Pinky y Cerebro) en el capítulo "Pinkasso".

Esto se debe a que mientras un autor está vivo, su obra se mantiene volátil por la esperanza de que produzca más, algo mejor, y no es sino en el momento de su muerte (incluso simbólica) que la producción se cristaliza y pueden señalarse los mejores y peores trabajos del conjunto, lo que despierta la atención de las masas. Por ello, tras la muerte sobreviene una valoración (a veces revaloración o sobreestimación) de la obra que permite recordar al difunto por lo que hizo, manteniéndolo vivo en el imaginario de la gente.

En el campo de la filosofía tenemos como paradigma a Sócrates, personaje que decide beber la cicuta y con ello se inmortaliza al punto de ser recordado su nacimiento cada tercer jueves de noviembre, día internacional de la filosofía. Similar a la figura de Sócrates fue Jesús de Nazaret para los cristianos, quien con su trágica muerte en el Gólgota marcó la historia del mundo occidental, lo que repercutió incluso en la calendarización subsecuente. Si volvemos la mirada más atrás encontramos también a Heracles, muerto por envenenamiento y bien acogido en el Monte Olimpo por Zeus. Sin embargo, es necesario no olvidar el plano en el que nos movemos, que es el del pueblo llano, pues también sucede tras la muerte de un allegado una suerte de mirada objetiva o revaloración de su vida en un afán de mantenerla con nosotros, viva en nuestro imaginario.

Si se sigue esto puede afirmarse junto al cantante que la gloria

es de los mortales el consuelo al morir

del mismo modo que era la areté –αρετή– para los griegos desde Homero (hacia el siglo VII a. C.) el ideal de nobleza al que se aspiraba y se concretaba en la muerte de quien lo perseguía.

sábado, 26 de septiembre de 2009

Qué es para mí la filosofía

Inevitablemente mi pluma me conduce a hablar de y sobre la filosofía, para mí ese saber que debe partir desde cero al proponer una teoría, que necesita formular desde el principio todos sus postulados con independencia del trasfondo individual, social e histórico existente. No por ello se debe apartar del aprender filosofía, actividad no contraria de la primera, sino complementaria, así como el pintor ideal es el que tras aprender toda la historia y técnica de la pintura, la "olvida" para innovar en su obra.

Los temas que puede abarcar son muy amplios pero siempre que se remita a otros campos del saber quizás sea más oportuno preguntarse por su fundamento. Lo demás será crítica filosófica, análisis filosófico, o de otro tipo de reflexiones sobre la filosofía, pero no filosofía en este sentido.

Así, estudiar un autor, una obra, una corriente, no es hacer filosofía. A lo mejor una exégesis sobre aquellos tenga el acierto de convertirse en filosofía, pero creo que la idea se aleja de la propuesta. Reivindico, pues, por unos filósofos que hagan filosofía: auténticas reflexiones cargadas de novedad individual, como aquél proyecto utópico llamado "Filosofía sin citas" por algunos compañeros de la facultad que quedó en el mero nombre. Entonces no digamos ya que filosofamos, por favor, si vamos a hablar sobre o desde el punto de vista de aquél señor. ¡La mayoría de esos señores ya están muertos! Yo no quiero saber qué es lo que les faltó decir. No quiero que pongas, pseudo-filósofo o cuasi-filósofo, tus ideas en boca de otro para no mancharte; quiero ver tu reflexión sobre el tema que te interesa y prefiero verte rendido en el intento, que vanagloriado en nombre del otro.

Si vas a hacer esto último, alumno, profesor, maestro o doctor, mejor di que eres investigador, porque hacer un análisis de tal cosa a partir de tal doctrina o identificar las relaciones del concepto de "tal-idad" entre dos, tres o los autores que se quieran no es filosofía, así como no hace poesía, cuento, novela o narrativa quien analiza cuentos, poesías, novelas y narrativas.

Seamos sinceros en este afán de ser filósofos.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Relación de poder entre profesores y alumnos

La potencia es definida desde la época de Aristóteles como aquella cualidad que tiene el ser de actualizarse, volverse acto. El poder es una entidad invisible que se posee siempre en relación a algo, por ejemplo: quien posee dinero tiene el poder de cambiarlo por bienes y servicios, por lo tanto, mientras más dinero, más poder.

Con los conocimientos sucede algo similar: el hecho de que la mayoría de los avances científicos, tecnológicos, artísticos y culturales tengan un trasfondo teórico, hace que los conocimientos se vuelvan una moneda de cambio bastante valorada.

Las instituciones de educación son los bancos de conocimiento. La población recurre a ellas por ser los sitios donde se va a aprender, a adquirir conocimientos, generar poder, a final de cuentas. Los encargados de transmitir los conocimientos son los profesores, entidades contratadas con ese fin. En un esquema muy básico, al ser los profesores los que poseen el conocimiento y los alumnos los que recurren a ellos en su búsqueda, se coloca a aquellos como los poderosos. Así, hay una relación vertical profesor-alumno, donde el alumno siempre estará subordinado al profesor.

En cierta manera esto no podría ser de otra forma: sería ridículo ir a aprender sobre lo que no sé de alguien que lo ignora. Por otro lado, esta tipificación corre el riesgo de colocar al profesorado como un ser incuestionable por parte de los alumnos. Precisamente es en el punto en que el conocimiento se cuestiona cuando el problema aparece. La forma de actuar de las partes se ve comprometida, el profesor tiene que elegir entonces entre defender su supremacía o declararse falible, y el alumno entre seguir cuestionando o guardarse los comentarios.

Evidentemente ni el profesor tiene todas las respuestas, ni el alumno es un ignorante, por lo que la verticalidad en este proceso me parece inaceptable. Aún así tampoco propugno por una horizontalidad que iguale al profesor con el alumno, sino por un paralelismo en el que tanto profesor como alumno se transmiten conocimientos uno al otro y en donde la variedad en el grado de conocimientos poseídos no afecta a la relación entre ambos.

Conjugación verbal para voz activa (latín)

Completa tabla con los esquemas de conjugación de los verbos sum, amo, habeo, rego y audio para voz activa.

Conjugación verbal voz activa latín


Descargar la tabla aquí.

lunes, 24 de agosto de 2009

Ficha descriptiva: Anaxímenes de Mileto

Nacimiento y defunción:
Este filósofo nació hacia el 585 a. C. en Mileto, al igual que Tales y Anaximandro, de quien se dice que fue discípulo. Muere durante el siglo VI a. C. habiendo quienes dicen que sólo vivió 30 años.

Aportaciones:
- Principio (ἀρχή): el aire (ἀέρα) indefinido (το ἄπειρον)

- Características del aire:

  • Naturaleza subyacente, única e indefinida (en dimensión), pero concreta.

  • En él todo nace y todo se disuelve (también dioses y seres divinos)

  • Se mueve siempre (si no lo hiciera no cambiaría cuanto cambia)

  • Invisible a la vista en su término medio.

  • Si es contraído o condensado es frío; si es denso o laxo, caliente.

  • Al hacerse raro, se convierte en fuego.

  • Conforme se condensa se convierte en viento, nubes, agua, tierra, piedras y luego todo lo demás a partir de estas cosas.

  • Abarca al mundo entero en forma de hálito (aliento)

  • Es nuestra alma (aliento vital) y mantiene nuestra cohesión.

- El movimiento es eterno y de él nace el cambio.

- Lo principal de la generación son los contrarios caliente y frío.

- La Tierra es plana y cabalga sobre el viento.

- El Sol, la Luna y las estrellas nacen de la humedad evaporada de la tierra que, enrarecida, se torna fuego.

- El sol (es tierra o fuego) en forma plana como una hoja. Por su movimiento rápido adquiere ardor.

- Las estrellas giran al rededor de la Tierra.

- El granizo se produce cuando el agua caída de las nubes se solidifica.

- La nieve se produce cuando las nubes bastante cargadas de agua adquieren solidez.

- El arco iris surge al caer los rayos del sol sobre el aire comprimido y que la primera parte es púrpura por estar inflamada por los rayos del sol, mientras que la otra es oscura a causa de la humedad.

- De noche la luna produce un arco iris.

- Los terremotos se generan cuando la tierra se ve alterada por el calor (se cuartea) y la humedad (se derrumba)


Fuente:
Alberto Bernabé Pajares. Fragmentos presocráticos de Tales a Demócrito. Alianza Editorial, MADRID 2008.
Kirk y Raven. Los filósofos presocráticos. Parte I. Edicíón digital.

Análisis etimológico de la filosofía (II)

Ya habiendo planteado a la filosofía como un amor al saber, ahora toca pensar en la filosofía como un amor a la sabiduría. En lo personal creo que la diferencia entre saber y sabiduría es que el saber es una posesión de someros conocimientos cualesquiera; mientras que la sabiduría, una posesión de profundos conocimientos cualesquiera. Aquél que quiera saber sobre el mar, tendrá una perspectiva más amplia si además de conocer la superficie indaga las fosas abisales.

Una ambigüedad subyace: ¿la diferencia es cuantitativa o cualitativa? Pues alguien que posee más conocimientos que otro, ¿sabe más o es más sabio? Opto por afirmar que sabe más, pues posee más conocimientos. En cambio, diría que es más sabio quien posee, aunque pocos, conocimientos de buena calidad. Calidad entendida como lo que hace diferentes a unos conocimientos de otros en relación a su veracidad o falsedad, a su generalidad o especificidad, y a su carácter teórico o práctico (que enseña cómo hacer algo)

La sabiduría, a mi parecer, es veraz, teórica y, además, específica y/o general; amar la sabiduría, por ende, se refiere a perseguir estas cualidades en la búsqueda de conocimientos; así, el filósofo es quien realiza esta operación, pero todavía falta algo. Quedarse en el mero acumular conocimientos no es hacer filosofía, sino adquirirla. Hacer filosofía es generar conocimientos del tipo mencionado que incidan además en las áreas del conocimiento actual (tener en cuenta que el estudio de la historia, por ejemplo, pese a estar muy lejana en el tiempo, sigue siendo un área del conocimiento actual)

domingo, 23 de agosto de 2009

Tabla de conjugaciones de verbos latinos

En esta entrada aprovecho para subir una tabla de conjugaciones para el presente del indicativo de los verbos sum, amo, habeo, rego y audio.

Falta depurarla y agregarle las demás conjugaciones, lo cual haré con el tiempo. De momento la dejo a su disposición.

Conjugación verbal indicativo latín


Descargar la tabla aquí.

sábado, 22 de agosto de 2009

Guía rápida para declinar y conjugar el griego clásico

Esta vez les dejo una guía para declinar y conjugar en griego clásico, como dice el título. Cabe señalar que no tiene rubros explicativos y que consta de una página, por lo que es bastante básica, pero creo que para fines prácticos está bien.

En ella he incluido los siguientes modelos de declinación (además del de πολις que es irregular): λογος, θηρ, κεφαλέ, φιλια y δοξα.

También agregué el presente indicativo de los verbos ειναι y διδάσκειν.

Finalmente aparece una tabla con los pronombres y sus declinaciones.

Guía rápida griego clásico


Pulsar aquí para descargar guía.

¡Nos seguimos leyendo!

jueves, 13 de agosto de 2009

Diferencia entre voluntad, deseo y apetito

La voluntad es una cualidad del hombre que se expresa en un querer, aspirar y/o desear. La voluntad es potencia en estado puro. El desear es, por tanto, una acción desde la voluntad en la que nos inclinamos a querer algo de manera intensa y, generalmente, dejando de lado las justificaciones racionales, pero no los sentimientos.

Por otro lado habría que tener en cuenta al apetito, en el que se suele englobar al deseo. El apetito es una tendencia ordenada del cuerpo hacia algo que causa placer. Considero que la diferencia existente entre deseo y apetito radica en que éste es ordenado, mientras aquél suele manifestarse de forma desordenada.

viernes, 7 de agosto de 2009

Los Simpsons: la televisión como vínculo social

La serie de televisión Los Simpsons (The Simpsons, en inglés) emitió su primer episodio, Simpsons Roasting on an Open Fire, el 17 de diciembre de 1989, como un especial de navidad. Desde entonces hasta la fecha han transcurrido cerca de 20 años en la serie se ha mantenido en el aire, creando cada año una temporada más (van por la veinte) y rompiendo así el récord de ser la serie con mayor tiempo al aire.

Los Simpsons trata sobre la vida de esta familia norteamericana de clase media y el pueblo de Springfield, lugar donde viven. Los capítulos tienen un video introductorio bastante característico que si bien ha variado a lo largo del tiempo en esencia sigue siendo lo mismo (a continuación se muestran tanto el primer video introductorio como el último, el cual se utilizará a partir de la vigésima temporada):




En ambos videos vemos a los miembros de la familia desempeñando sus actividades características: Bart castigado en la escuela, Homer trabajando en la planta nuclear, Marge haciendo las compras con Maggie y Lisa improvisando en plena clase de música. A grandes rasgos, las características de los miembros de la familia Simpson son los siguientes:

  • Homer (el padre) es un individuo obeso, calvo y perezoso que trabaja en una planta nuclear como inspector de seguridad.
  • Marge (la madre) es ama de casa, delgada, regañona y sumisa, que se casó con Homer por haberse quedado embarazada de él.
  • Bart (el primogénito de la familia) es inquieto, indisciplinado, desinteresado por los estudios.
  • Lisa (la segunda en el orden de los hijos de esta familia) es buena estudiante, activista, vegetariana, amante de la música y el arte en general, por lo mismo suele rayar en el pedantismo.
  • Maggie (el bebé de la familia, la hija menor) no puede hablar pero esto lo compensa con una mímica excepcional.

Los miembros de esta familia tienen características muy dispares, ocupaciones diferentes, cualidades y aspiraciones diversas; sin embargo, en los videos se puede ver que sus caminos tan distantes van confluyendo hasta llegar a casa, en busca del sofá donde se ponen a ver la televisión, actividad que los une como familia. Se puede expandir la esfera vinculante de la televisión a los amigos, conocidos, compañeros de estudio, trabajo y gente en general, ya que tanto se puede pasar tiempo viendo la tele en familia, como con cualquier número de personas en restaurantes, bares, salas de espera y demás establecimientos con televisiones puestos allí para atraer a la gente, mantenerla distraída mientras espera, etcétera. Las pantallas gigantes que se ponen en las plazas o grandes espacios abiertos para que la población pueda unirse a contemplar un partido de fútbol son otro ejemplo. La televisión también conecta a la gente a través de la programación: si el Otro ha visto lo mismo que uno es posible comentarlo, o si no lo ha visto se le puede contar. Y uno de esos programas familiares que suelen vincular y comentarse es Los Simpsons.

Por otro lado, llama la atención que la familia Simpson, tras encender la tele, dé inicio al episodio de los Simpsons, es decir que llegan a casa para ver su propia vida en televisión. Sobre esto quiero hacer dos comentarios.

Primero: creo que la televisión suele reflejar la forma de ser de una gran variedad de personas, de proyectar sus aspiraciones e ideales, entre otras cosas, y por ello tiene la capacidad de unirlas y, si a esto unimos el hecho de que en la mayoría de los hogares se cuenta con al menos un televisor, es más fácil comprender por qué se convierte en un vínculo de unión social.

Finalmente: la familia que llega a ver su propia vida en la televisión es un ejemplo perfecto de cómo los medios audiovisuales se convierten en un medio más fidedigno que la vida misma en cuanto a la percepción de la verdad/realidad se refiere.


Recursos de interés

Portal de los Simpsons (español)

Información sobre los Simpsons en Wikipedia (español)

Página oficial de los Simpsons (inglés)

Guía de episodios de los Simpsons (inglés)

Personajes de los Simpsons (inglés)

viernes, 31 de julio de 2009

Teleología del Super Mario Bros

La teleología [del griego τέλος, fin(alidad), y λογος, que en este contexto se puede traducir como "tratado" o "saber"] es una rama de la filosofía que se encarga de buscar la causa final de las cosas. Las causas (αἰτία) fueron descritas por Aristóteles hace cerca de 2300 años; este filósofo, nacido en Estagira, consideraba que para conocer las cosas primero era necesario concebir el porqué, sus causas, y distinguía cuatro tipos de causas: la material (de lo que algo se genera; la silla: de madera), la formal (lo que da forma a la cosa, por lo que se define; análoga a la esencia), la eficiente (lo que genera el cambio de estado, el comienzo del movimiento; de un libro: un escritor) y la final (el propósito; hacer ejercicio: para estar en forma) La que nos interesa en este texto es la final, conocer el propósito o motivo.

Super Mario Bros es un juego de plataformas lanzado durante enero de 1985 para la consola NES (Nintendo Entertainment System). En este juego podemos elegir entre jugar con uno de los hermanos Mario, Mario o Luigi, ambos fontaneros.

El juego comienza con Mario (o Luigi, pero para simplificar siempre me referiré a Mario), de pie y mirando hacia el frente, en el primero de ocho mundos del Reino Champiñón (Mushroom Kingdom). A partir de allí sólo nos queda avanzar, no hay manera de retroceder. En ese avanzar a lo desconocido y no querer echar un vistazo hacia atrás, Mario se topará con un sinfín de obstáculos y enemigos. Y este es el momento en que uno piensa "¿por qué esta serie de hongos, tortugas, plantas carnívoras, peces voladores, pulpos, balas de cañón, precipicios y trampas se interponen en mi camino?" "¿Qué es lo que tienen tan bien defendido?". Tras superar algunos obstáculos del primer mundo, llegamos a un estandarte del reino y a un pequeño fuerte. Ahí está, eso es lo que sin duda defendían: un pequeño fuerte del Reino Champiñón lleno de fuegos artificiales.

Pero no, resulta que los fuegos artificiales no son motivo para que Mario arriesga su vida. El fuerte parece no ser más que un lugar de reposo para Mario, porque así como entra, sale.

Asimismo se podría pensar que Mario lo que busca son monedas, hongos, flores y estrellas, volviéndose un fontanero cualquiera, materialista empedernido, pero no es así porque cada ciento de monedas son cambiadas por una vida, los hongos lo hacen más grande, las flores le dan la habilidad del fuego y la estrella lo vuelve invulnerable, lo cual le permite continuar la faena.

La búsqueda continúa, encontrándonos siempre al principio de cada nivel con un Mario mirando al frente y al final con un pequeño fuerte que nos da la bienvenida. En el penúltimo nivel (tercero en orden) de cada mundo está situado, en lugar del pequeño fuerte, un enorme castillo, que será el último nivel (cuarto) del mundo.

Tras sobrevivir a los precipicios de lava, los obstáculos de fuego y los enemigos del castillo, Mario llega a un punto donde, para continuar, debe esquivar llamaradas provenientes del rey del castillo, Bowser (líder de los koopas, todas esas tortugas enemigas de Mario).

Una vez vencido este jefe, parece que al fin Mario ha triunfado, pero en lugar de ser premiado, es apremiado por Toad (habitante del Reino Champiñón con la cabeza en forma de seta) a que vaya en búsqueda de su princesa, que está en otro castillo.

No es sino hasta este momento en que se sabe que Mario lucha por su princesa, que su finalidad es rescatarla de Bowser, quien la ha raptado. Así continúa todo el juego, con Mario avanzando siempre hacia el frente, superando obstáculos, venciendo jefes, para, la mayoría de las veces, encontrarse con que su princesa se encuentra en otro castillo.

Pero al final, en el último castillo del último mundo, y tras vencer a Bowser equipado con martillos y todo

Mario encuentra lo que busca, a su amada princesa, quien le agradece el haberla salvado, lo tranquiliza diciéndole que su búsqueda (quest en inglés) ha terminado, pero que, con todo, le tiene una nueva.

Desde ese momento, Mario se verá inmerso en una eterna búsqueda teniendo como causa final, como telos (τέλος), a su amor, a la princesa Peach, que bien pudiera ser su Dulcinea: aspiración ideal, inalcanzable.


Consideraciones adicionales

¿Por qué un fontanero? Una respuesta que salta a la vista tras jugar el título es porque a lo largo de los mundos se hallan bastantes tuberías y ¿quién mejor para lidiar con tuberías que un fontanero? Pues Mario. Pero teniendo en cuenta la causa final y la imposibilidad de hacerse Mario con la princesa se pueden extraer diversas conclusiones, como que Mario en efecto es un Quijote, un jugador empedernido de videojuegos que se imagina todo ese aparato de monstruos y dificultades para rescatar a una princesa también imaginaria; o, algo más retorcido, que pese a ser Mario el más valiente, su condición económica y el estrato social en el que se encuentra ubicado, lo convierte a los ojos de la princesa en un amigo al que hay que tener cerca por protección, pero que nunca podrá aspirar a sus favores; también que, como Hesiodo escribe en su Teogonía, el amor ('Έρος) "que es entre los inmortales dioses bellísimo, que desata los miembros, y de todos los dioses y hombres domeña la mente y la voluntad prudente, en el pecho" (Hesiodo, Teogonía, v. 120-2), repito que el amor mueve a Mario como a todos los hombres y dioses y haría lo mismo una y otra vez con tal de volver a ver a su amada; finalmente cabe pensar en la enseñanza que deja el juego: es verdad que Mario se introduce en una búsqueda perpetua de su causa final, pero de esto se puede extraer la moraleja de que para conservar lo que se quiere (en este caso ver a la princesa) es necesaria una incansable búsqueda que implique sacrificio y esfuerzo, lo cual se puede aplicar a la filosofía: para encontrar la Verdad es necesario sacrificarse y arriesgarse (aventurando teorías, por ejemplo) en su búsqueda (aunque la Verdad no sea más que otra Peach, otra Dulcinea).


Enlaces y recursos de interés

Biografía de Aristóteles.

Emulador de NES (virtuanes) y rom del Super Mario Bros.

Fragmentos de Aristóteles sobre el concepto de causa.

Speed run del juego:


lunes, 27 de julio de 2009

La contingencia en la vida

Es ampliamente reconocido y dado por hecho que para vivir hay ciertas necesidades que deben satisfacerse, como el comer, el beber, el respirar. En esta ocasión vengo a reflexionar sobre lo contingente (entendido aquí como lo contrario a lo necesario) de la vida. Es muy común pensar que para vivir es necesario esto o lo otro. Pero no creo que esto sea así. Lo necesario para vivir es nacer solamente. Ya habiendo nacido se vive y, pese a que la vida se vea truncada en un corto plazo, esto no es causado por no haberse satisfecho las necesidades de la vida, sino debido a que se cumplieron las de la muerte.

Ya habiendo nacido se está vivo y ya en el camino de la vida no es necesario nada para seguir viviendo (salvo mantenernos en la unidad de ser). Por lo tanto, para vivir no es necesario comer, porque no se necesita estar comiendo para vivir, lo mismo que no es necesario estar bebiendo. Asimismo esto se extiende al oxígeno y demás recursos que suelen pensarse como necesarios para vivir: no es necesario estar suministrándolos para continuar en vida. No es la vida la que está requiriendo satisfacer determinadas necesidades para evitar la muerte, es la muerte la que espera que se cumplan sus requisitos para acabar con la vida. Es necesario que no haya nutrientes para que el cuerpo comience a alimentarse de sí mismo; que no haya agua para que la armonía bioquímica comience a torcerse; un buen accidente que bloquee todos los sentidos... En la vida todo es contingente, es la muerte, repito, la de las necesidades.

Por lo tanto no se trata de imaginarnos a la vida como determinando la muerte, sino a la muerte determinando la vida. En los griegos esta función la desempeñaba Átropos (Ἄτροπος), hermana mayor de las moiras (μοιραι), quien era la encargada de cortar el hilo de la vida que sus dos hermanas disponían. Desde luego no propongo a la muerte como sujeta a la voluntad de alguna deidad, sino que las acciones que realizamos van más encaminadas al morir, que al vivir.

sábado, 25 de julio de 2009

La influencia de la influenza

Sin entrar a discutir su existencia objetiva y verificable como enfermedad, se afirma que la influenza o gripe porcina es transmitida por un virus altamente contagioso, A (H1N1); esta enfermedad mortal se ha convertido en la enfermedad en boga, adquiriendo a mi parecer más fama que el SIDA.

Tos, dolor de cabeza, nariz congestionada, dolor muscular, escurrimiento nasal, cansancio extremo, malestar general y fiebre alta son los síntomas que se padecen por la influenza. Carraspera, respiración preocupada, mano en constante búsqueda de la frente o mejilla, gel antibacterial en el bolsillo, arraigo domiciliario y tapabocas son los síntomas de la influencia que se pueden traducir de la sintomatología de la influenza.

La influenza no ha acarreado solamente previsión y/o pánico a gran parte de la población mundial. También ha generado desconfianza, rumores, chismes. La información corre como el viento y de boca en boca transmuta, choca y se entremezcla para llegar a contagiar al siguiente que la transmutará. Es el juego del Teléfono descompuesto a magna escala y debido a la novedad y gran cantidad de información que corre por medios tan al alcance de la mano para muchos como son la radio, el periódico, la televisión y el Internet, el número de hipótesis al respecto crece exponencialmente sólo teniendo como límite la imaginación colectiva mundial.

Haré un intento por abordar el tema de la influenza bajo una reflexión filosófica, para lo cual hablaré de dos grados de afectación que ha tenido a nivel social bajo una óptica filosófica (o al menos analista o crítica) en la medida de lo posible:

La influenza ha venido a modificar la estética de las personas. Recuerdo que en la semana o quincena que los medios declararon crítica aquí en Monterrey y área metropolitana, el tapabocas se convirtió en accesorio más que medida de prevención. No sé si a causa de la demanda ofreció variedad la oferta o si la oferta amplio su abanico, lo cierto es que durante dicho lapso de tiempo conocí casi todas las formas y colores de tapabocas que existen: el del cirujano, el industrial, el azul, el blanco, el del dentista, el que tiene dos asas para las orejas, el que tiene hilos para anudarse... En fin, muchas personas que pudieron se dieron gusto y tomaron lo que querían; los más, lo que podían. Pero no sólo hubo variedad en marcas y modelos, los trazos y dibujos no tardaron en brotar y la expresión artística y opiniones personales se dejaron ver: desde sonrisas y muecas hasta frases como "soy gay y qué" adornaban los tapabocas. Me parece interesante observar cómo casi en cualquier situación las personas buscan ser diferentes; como una necesidad inherente a la persona de diferenciarse culturalmente, pues personal, psíquica, vivencial, física y temporalmente es única.

La forma de relacionarse con los otros también se vio modificada tras la recomendación de restringir el contacto físico. Esto tuvo repercusiones en dos tipos de personas principalmente: estaban los que se construyeron su esfera invisible que los mantenía alejados no sólo del contacto sino del microambiente que rodeaba a los otros, y los que se crearon su ariete invisible al manifestar cualquier movimiento parecido a un síntoma de la enfermedad. Algo que me llamó mucho la atención fue ese pánico que hubo al enemigo invisible, camaleón que se arrastraba sobre el aire. "Uno no se sentía seguro ni en el puesto de tacos" fue más o menos lo que dijo un profesor de la facultad. Si el aislamiento que nos imponemos con los medios de comunicación es para algunos alarmante y cuestionable, el que se dio durante la epidemia resultó alarmante: el prójimo se convertía, ya no potencialmente, en enemigo, en peligroso, en factor de riesgo. El arraigo domiciliario a que muchos se sometieron fue otra de las consecuencias inmediatas que produjo la enfermedad: había necesidad de resguardarse e informarse: qué mejor lugar que el hogar. Me atrevo a decir que el uso del Internet se vio incrementado hasta los cielos, más allá de los satélites que transmitan la información virtual. Fue algo así como estar en contacto sin contacto, como sexo con condón: me relaciono contigo, pero no me puedes contagiar; estamos a salvo. La actividad de blogs, clientes de mensajería (Messenger, Yahoo...), sitios como el Facebook y MySpace fue desbordante. Por otro lado, para muchos esta oportunidad significó el revivir los viejos momentos en que pasaba tiempo de calidad con su familia: algo que no se consiguió con las campañas a favor de estar en familia y la publicidad que se le dio al Día de la familia, lo consigue el temor a contagiarse una enfermedad. Aquí puedo ver que parece haber una necesidad de comunicarse y de mantenerse en relación con el otro que no se pierde incluso en situaciones adversas, pero que se ve modificada por el miedo (en este caso el de contraer una enfermedad)

Espero con esto haber rozado, aunque sea un poco y por encima, si se quiere, el tema de la influenza con el guante de la filosofía. (No vaya a ser que me infecte)

Grande es el amor de Dios

Dios nos ama a todos por igual:

Le somos indiferentes.

Optar por el impersonal en entrevistas psicológicas

Hoy José Vieyra, amigo y compañero de la facultad, comentó cómo un profesor suyo de psicología salió de una pregunta que le hizo un paciente durante una entrevista psicológica (por lo que tengo entendido un psicoanalista debe intervenir lo menos posible, idealmente sólo haciendo que el paciente exprese su sentir, durante la terapia)

La pregunta que el paciente le planteó fue la siguiente: ¿Puedo hablarle de tú o de usted? Para mantener la elección en manos del paciente el psicoanalista respondió: Como tú quieras o como usted quiera.

Esta anécdota, en un primer momento me hizo pensar en el ingenio del psicoanalista, quien rápidamente supo adaptarse a la situación. Pero pasado un rato reflexioné sobre lo que hizo el terapeuta y lo relacioné con algo que aprendí en mi clase de Español hace unos cinco años: el orden es muy importante en la expresión. No es lo mismo decir el "niño pobre" que el "pobre niño", la fuerza expresiva recae sobre la primera de las palabras mencionadas.

A modo de reflexión personal y reconociéndome de antemano profano en entrevistas psicoanalíticas, considero que para evitar dar el menor indicio para que el paciente se incline por una opción al momento de responder, el entrevistador debe optar por el impersonal. Se me ocurren muchas respuestas, como: Es decisión del paciente, Esto es como el paciente quiera, etc. De este modo no se le da a elegir ni se le mencionan ideas que conlleven cierta prioridad.

Espero sus comentarios.

lunes, 1 de junio de 2009

Consideraciones sobre Análisis etimológico de la filosofía (I)

Véase el texto Análisis etimológico de la filosofía (I).

Algunos compañeros de filosofía y leyes me han cuestionado sobre la entrada mencionada y con ello me han puesto a pensar acerca de lo que he escrito, motivo por el cual he decidido recapitular sobre lo que hemos hablado y he aprendido de ellos.

La pregunta que me plantearon fue la misma que me hice yo antes de escribir el análisis: qué es la filosofía; cuando me lo preguntaron dije que no lo sabía (no lo sé) y que precisamente por ello estoy haciendo estos escritos. Con toda seguridad, si supiera qué es la filosofía con aquella convicción de no necesitar reflexionar sobre el tema, escribiría en forma de aforismo (como junto a ellos hemos comentado escribió Nietzsche) lo que es, lo compartiría y comenzaría a remodelar la piedra filosófica esculpida hasta ahora con dicho cincel.

Pero como no tengo esa respuesta hago esto, hice aquello y haré lo posible para responderme a la pregunta, pese a caer en la espiral obsesiva de la que me ha hablado Vieyra, frase que me imagino se utiliza en psicoanálisis para expresar técnicamente (aunque con cierto deje peyorativo) el "nada más no sales de allí" que a veces se utiliza en México y/o para significar que "le damos vueltas a la misma cosa". Lo que no sé si esté contemplado es que la espiral, en cada giro, avanza respecto el punto sobre el que da vueltas. Quizás se quiera decir "dar vueltas en círculos", pero en cierta forma la espiral hace que la frase tome una denotación más erudita.

Dejando de lado pensamientos que me distancian de mi exposición, vuelvo al tema con lo siguiente: Se mencionó la problemática de qué es el filósofo: ¿uno se autoproclama filósofo o es otro el que nombra filósofos a los demás? Por eso pienso que para saber quién es filósofo es necesario primero definir la filosofía, aunque ciertamente la filosofía sea algo creado por el hombre, lo que no quita que sea a partir de ella que se denomine filósofos a los que la hagan. Por ejemplo, un hombre hace algo, pero sólo hasta que a dicho algo se le denomina, digamos, pintura, podremos decir que ese hombre es pintor. También hay que recordar que no todos los hombres que hacen pinturas se consideran pintores, así que para no caer en el error de nominar a través de un certificado, es necesario definir primero lo que es pintura para poder decir quién es pintor, no sólo por operación.

Abordemos otro punto que me llamó la atención. Mis compañeros opinaron que a lla pregunta ¿qué es la filosofía? terminaría respondiendo lo que es para mí la filosofía. Me pareció entender que ello supondría la edificación de mi trinchera y el comienzo de mi batalla, como si al definir lo que es para mí la filosofía estuviera afilando navajas. Planteaban que el llegar al definir subjetivamente la filosofía traería como consecuencia lo que sigue: hay filosofía porque existen filósofos que filosofan sobre lo que ellos dicen que es la filosofía. Esto introduce un tema que había estado en boca de compañeros de otros semestres y maestros de la facultad: la crisis de la filosofía. Creo que en esto radica para algunos dicha crisis, por parecer que al naufragar bajo esta tormenta de subjetivismo, no posee ancla que la mantenga fija, como en el caso de otros saberes, cuyo objeto parece bien definido. Sin embargo, no me parece suficiente pensar que porque algo caiga presa del subjetivismo se encuentra en crisis. ¿Qué se escapa del subjetivismo? ¿Acaso el objetivismo no es construido por una subjetividad colectiva?

Aún así, si el subjetivismo es el problema, entonces habrá que tomarlo como síntoma de que la filosofía está en crisis (como dice Vieyra) y habrá que objetivarla. ¿De qué forma? Construyendo esa objetividad filosófica. Pero en caso de no significar ello una crisis quizás podamos pensar (como el compañero Joaquín Gonzalez de leyes) que toda reflexión racional puede modificar la realidad sensible.

sábado, 23 de mayo de 2009

Breve reflexión sobre la tecnología en telecomunicaciones

Durante la noche del 31 de diciembre del 2008 estaba en casa de unos amigos junto a su familia, celebrando y esperando al año 2009. En realidad se nos pasó el cero nueve mientras charlábamos de muy diversos temas.

Como compartíamos mesa personas de edades muy dispares, terminamos hablando de los cambios que se han dado en los modos de vida entre el ayer y hoy. Algo que me llamó mucho la atención aquella vez fue que los mayores mencionaron la dependencia (ya no necesidad) que tenemos la gran mayoría del teléfono móvil o celular. Algunos ni siquiera lo usan para lo que comenzó a usarse: hacer llamadas. Me gusta el siguiente video, una parodia sobre el iPhone que creo es bastante ilustrativa.



Pero la conversación no se detuvo allí. No nos quedamos hablando del hombre prótesis que menciona Freud en su Malestar de la cultura, el que se va complementando con los aparatos tecnológicos para aproximarse lo más posible a ser Dios, no. La conversación cogió un rumbo para mí inesperado. Hablamos de cómo el uso del teléfono móvil habría echado a perder algunas obras de arte. Específicamente se mencionó a Penélope, la protagonista de la canción de Joan Manuel Serrat cuyo título lleva el mismo nombre. He aquí un video de la canción:



Tras escuchar la canción es evidente que un par de portátiles habría desecho la historia, quizás por completo. Imaginemos lo que sucedería: Penélope y el viajero se hubieran llamado, "mensajeado" e incluso visto a través de la pantalla; lo que aflojaría el "mírame, soy tu amor, regresé...". Estás igual que como te vi antes de que llegara el tren, diría la mujer del bolso de piel marrón.

Me parece interesante cómo el uso de las tecnologías puede dar mucho qué hablar, pero también mucho qué callar (recuérdese el ya repetido pensamiento: tenemos tantos medios para comunicarnos ahora, que ya no hablamos ni con el vecino, por no decir de las personas con las que cohabitamos) En este caso el vínculo entre el espectador y la canción se podría ver afectado por la sencilla pregunta "¿y por qué no se comunica con él?", lo que creo conllevaría un desprestigio de la pieza. No es necesario, pero me parece esto una muestra de cómo el arte se ve aumentado y condicionado por la tecnología.

Irónicamente, esperaré sus comentarios ansiando un diálogo que se dé en un plano de la tecnología paralelo; deseando, claro está, algún día bajar del tren, saltar el vacío entre paralelismos y poder reconocernos cuando lleguemos al andén.

viernes, 22 de mayo de 2009

Ficha descriptiva: Anaximandro de Mileto

Nacimiento y defunción:
Nace en las postrimerías del siglo VII a. C., poco después que Tales, su conciudadano, y muere hacia mediados del siglo VI a. C.

Aportaciones:
- Principio (ἀρχή): el ápeiron (το ἄπειρον), es decir lo indefinido, lo infinito.
- Características del ápeiron:
  1. eterno y nunca envejece;
  2. inmortal e indestructible;
  3. lo abarca (rodea todos los mundos) y lo gobierna todo;
  4. causa de todo nacimiento (en él todo nace) y destrucción (en él todo perece o hacia él todo perece)

- La generación y corrupción se dan por turnos y cíclicamente a causa de la separación de los contrarios a partir del ápeiron, producida por el movimiento eterno desde un tiempo indeterminado.
- Existen innumerables mundos.
- Las cosas son equidistantes.
- La Tierra tiene forma cilíndrica y la gente vive en sus extremos planos.
- Al nacer este mundo (κόσμος) "lo que produce lo caliente y lo frío desde lo eterno" se separó y al momento nació una esfera de llama en torno al aire que envuelve la Tierra; al romperse la esfera sus trozos se cerraron en círculos que formaron el Sol, la Luna y las estrellas.
- Las estrellas son círculos de fuego rodeados de aire.
- Los animales nacen de lo húmedo calentado por el Sol.
- Los primeros animales fueron peces o parecidos a éstos.
- El hombre nació de animales de distinta figura (peces) hasta alcanzar la pubertad (momento en que fueron capaces de alimantarse por sí mismos), tras permanecer dentro de ellos en forma de embrión.
- Respecto a los demás animales, sólo el hombre necesita de una larga crianza (por lo que debió de nacer de otro animal, pues de otra manera no habría sobrevivido)
- El viento es el movimiento (de las partes) del aire.
- Las lluvias se producen por la evaporación que surge de la tierra por la acción del Sol.
- Los relámpagos se generan debido a que las nubes son desgarradas por el viento.


Fuente:
Alberto Bernabé Pajares. Fragmentos presocráticos de Tales a Demócrito. Alianza Editorial, MADRID 2008.
Kirk y Raven. Los filósofos presocráticos. Parte I. Edicíón digital.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Ficha descriptiva: Tales de Mileto

Nacimiento y defunción:
Nace en Mileto y puesto que predijo el eclipse solar de 585 a. C. se cree que nació durante el último tercio del siglo VII a. C. Su muerte debió de ser a mediados del siglo VI a. C.

Aportaciones:
- Principio (ἀρχή): el agua (τό ὕδατος) de los cuatro elementos el más adecuado para ser causa (αἰτία)
- Todo está lleno de dioses, porque el alma está mezclada en el todo (universo)
- El alma es capaz de producir movimiento (como la del imán, que produce movimiento de atracción o repulsión)
- La Tierra descansa sobre el agua como un barco o leño.


Fuente:
Alberto Bernabé Pajares. Fragmentos presocráticos de Tales a Demócrito. Alianza Editorial, MADRID 2008.
Kirk y Raven. Los filósofos presocráticos. Parte I. Edicíón digital.

lunes, 4 de mayo de 2009

Análisis etimológico de la filosofía (I)

Una de las definiciones etimológicas de filosofía es la de amor al saber: filo (φιλο) es amor y sofía (σοφια), saber. Esto no aporta nada nuevo ni despierta interés alguno, desde luego.

Sin embargo, hace días estuve pensando en la posibilidad de que la filosofía se expresara también como un amor a lo desconocido y he aquí mis reflexiones:

Digo que se ama saber lo desconocido, porque en el caso contrario, en el momento que creemos conocer algo, ya no nos interesa saberlo: ya lo sabemos. Así, se puede decir que la filosofía es un amor a saber lo desconocido.

Cuando releí esto me di cuenta del error que cometía: Al momento de decir que la filosofía es un amor a lo desconocido y que cuando creemos conocer algo ya no nos interesa saberlo, consideraba al saber como un movimiento, por ejemplo: "desconozco cómo se conduce un coche, voy a saberlo para poder conducir". Saber algo no es ir a ello, estudiarlo ni aprenderlo, sino poseerlo: "conduzco porque sé conducir", "escribo la letra a porque sé escribirla" (se puede objetar el hecho de existir gente que escribe la letra "a" sin saber que se trata siquiera de una letra; a esto respondería diciendo que lo dibujado por dicha gente es un garabato idéntico a una a, lo que no significa que la esté escribiendo, sino que ha habido una coincidencia)

Luego probé cambiando desconocido por ignoto (lo que se ignora) y donde dice conocer por saber y esto fue lo que quedó (señalo en cursivas los cambios).

Digo que se ama saber lo que se ignora, porque en el caso contrario, en el momento que creemos saber algo, ya no nos interesa saberlo: ya lo sabemos. Así se puede decir que la filosofía es un amor a saber lo que se ignora.

Como se ve, caigo en el error de decir "cuando creemos saber algo, ya no nos interesa saberlo"... ¡qué absurdo!

Ya habiendo aclarado que el saber lo considero como un poseer, no como un "voy a poseer", analizaré el filo de la palabra. Decir que la filosofía es un amor al saber me parece algo muy ambiguo, porque el amor tiene muchas acepciones. Pero sin ahondar mucho en controversias, se puede decir que hay personas que aman saber en el sentido de gustarles poseer saber; y también que se interprete ese amor al saber en el sentido de querer saber. La diferencia entre ellas radica en que la primera es pasiva y la segunda activa: La primera se satisface con el saber que posee, mientras que la segunda quiere poseer saber. Con esto se pueden dar las siguientes posibilidades: 1) que la persona guste del saber que posee, 2) que quiera poseer saber, 3) que guste del saber que posee y quiera poseer más saber, 4) que ni guste del saber que poseen ni quieran poseer más saber y 5) que le sea indiferentes el poseer y/o el querer más saber.

No me siento capaz de decir que alguna de las posibilidades anteriores se da más que las otras. En todo caso la respuesta sería personal. Pero me pregunto si el hecho de preguntarnos sobre ello, invalidaría la quinta posibilidad y dejara de sernos indiferente...

Ahora volvamos al tema del que comencé escribiendo: la filosofía como amor al saber. Dije que entendía al saber como posesión y al amor en forma análoga a gusto y a querer. El quid es que en cualquier manera (de las mencionadas) que se entienda el amor al saber, se trata de un saber indiferenciado, general. No se trata de saber conducir o de cómo se escribe la letra a, sino que es saber sobre cualquier cosa. Así, quien ame saber será filósofo y siempre que ejecute un acto o cree algo relativo a esta forma de entender el amor al saber, hará filosofía.

La dificultad estriba en que no todos los que dicen amar el saber, que lo hagan y/o lo sientan, son considerados filósofos. Si la situación precedente se da, la filosofía no podría ser concebida como un amor al saber.

martes, 28 de abril de 2009

Clasificación y breve historia de la lengua griega

El griego es una lengua muy importante para la filosofía, palabra que proviene del griego. Es en griego que están vertidas las semillas de este saber. Por ello dedicaré algunas líneas a exponer las características generales de su génesis y clasificación con respecto a otras lenguas.

Para ello comenzaré con la lingüísitica. Ésta disciplina se encarga de clasificar la gran cantidad de lenguas existentes ayudada de diversos criterios, entre los que destacan dos: el morfológico y el genealógico.

El criterio morfológico analiza la forma y/o estructura de las lenguas para categorizarlas por su afinidad. Bajo este criterio se distinguen tres grupos de lenguas, como se muestra en el siguiente esquema:

  1. las monosilábicas, en ellas las palabras son raíces que no cambian y su significación depende del orden en la oración, como en el chino;
  2. las aglutinantes, donde las palabras se colocan una al lado de la otra sin fundirse entre sí, por ejemplo el japonés;
  3. las de flexión, cuyas palabras constan de raíz y morfemas. Éstas se dividen en dos tipos:
    1. analíticas, que manifiestan las relaciones gramaticales através de preposiciones, artículos y auxiliares, v. g. el español;
    2. sintéticas, las cuales expresan las relaciones gramaticales mediante morfemas que se unen a la raíz, como en el caso del griego.
La clasificación genealógica se centra en encontrar el origen común (lenguas madres) del que provienen los distintos grupos de lenguas (denominadas hijas, con respecto a cada lengua madre). El conjunto de lenguas madre e hijas constituye una familia lingüística. Las familias, a su vez, divergen en ramas lingüísticas.

Existen variedad de familias lingüísticas: semítica, camítica, americana, australiana, indoeuropea... en ésta última se haya el griego. La familia indoeuropea está enmarcada geográficamente por Escandinavia al norte, el mar Mediterráneo al sur, India al este y el océano Atlántico al oeste. Sus ramas son la indoirania y la griega. La rama griega, según Agustín Mateos (Etimologías 23), se esquematiza de la siguiente manera:

  • Rama griega, dividida en antigua y moderna.
    • Griego antiguo, comprende los dialectos jónico, eólico, dórico y común.
      • El jónico se habló en el centro de la costa occidental de Asia Menor y se divide en:
        • antiguo, épico o heróico: correspondiente a Homero, Hesiodo y los épicos.
        • moderno: incluye desde las primeras obras en prosa hasta Herodoto e Hipócrates.
        • ático: nombrado así por darse en la región Ática, cuyo centro era Atenas. Esta modalidad "superó como lengua literaria, a las restantes formas del griego" (Mateos Etimologías 23). El ático a su vez se subdivide en:
          • antiguo: usado por los trágicos griegos Esquilo, Sófocles y Eurípides; por el cómico Aristófanes y el historiador Tucídides.
          • medio: engloba las obras de Platón y del historiador Jenofonte.
          • moderno: lengua en la que escribió Aristóteles y los oradores Deóstenes, Esquines y Lisias.
      • El eólico o grupo dialectal aqueo tiene como exponentes a los poetas Alceo y Safo. Comprende las variantes:
        • septentrional o eólico propiamente dicho: lenguaje de los griegos que emigraron de Tesalia a Lesbos y alrededores.
        • meridional: abarca el dialecto de Arcadia y el de Chipre.
      • El dórico dórico se habló en el nordeste de Grecia, el Peloponeso, Corinto, Megara y Creta; en este dialecto se escribieron las odas de Píndaro y las bucólicas de Teócrito.
      • El dialecto común (ἡ κοινὴ διάλεκτος): surgió hacia el siglo III a. C por la conjunción del ático y las diferentes lenguas con las que tuvo contacto tras las conquistas macedónicas. A este dialecto corresponden los escritos de Polibio, Estrabón, Diodoro, Dionisio de Halicarnaso y Plutarco. Cabe destacar que este dialecto encontró expresión en la Biblia griega, donde es llamado griego bíblico y presenta influencias semíticas y latinas.
    • Griego moderno: lengua simplificada y derivada de la κοινὴ.
Con lo expuesto se ve que el griego es una lengua ampliamente utilizada por filósofos, historiógrafos, biógrafos y poetas de la Antigüedad. En sus escritos suelen estar las líneas que posteriormente siguieron los pensadores medievales, renacentistas, modernos, posmodernos y demás, por lo que considero importante leer a los griegos, de preferencia en su idioma original.


Bibliografía:
Mateos, Agustín. Etimologías grecolatinas del español. México: Esfinge, 1966.

sábado, 21 de marzo de 2009

Hola mundo

Un nuevo blog acaba de nacer, como muchos que lo han hecho a lo largo del tiempo. ¿Por qué y para qué este blog?

Intentaré verter aquí algunos conocimientos sobre el mundo de la filosofía, que tanto me gusta. Me imagino que inicialmente serán apuntes de clase, que procuraré hacer breves, concisos y comprensibles.

Con el tiempo pienso subir textos con mis ideas, o al menos ensayos elaborados a partir de otros trabajos.

Para qué hago este blog, sencillo: para reforzar mis conocimientos y compartirlos con quien pueda estar interesado en ellos.

Por qué hacer este blog, porque considero que es una buena manera de volver a la escritura, la cual he dejado de lado por demasiado tiempo.

Espero verme por aquí con frecuencia.

Hola mundo.